Kelly Lebrock en La Mujer de rojo, Julia Roberts en Pretty Woman, Maggie Cheung en Deseando amar, Marisa Paredes en Tacones lejanos, Vivien Leigh en Lo que el viento se llevó, Penélope Cruz en Jamón, Jamón o la impresionante Winonna Ryder en Drácula.... todas vestían de rojo.
De alguna forma, su creador las imaginó de rojo o bien la jefa de vestuario convenció al director de que así debían vestir para mostrar la personalidad y la intensidad de cada personaje. Seducción, fuerza, atracción, pasión, tentación,calidez, provocación....
Mas allá del espectro de Newton, y la revolución francesa, el rojo ha significado muchas cosas a la vez, desde anunciar peligro, a pedir libertad y aquí es donde vuelve a estar presenta la moda. Y es que fue a principios del siglo XX cuando Elizabeth Arden apoyaba la lucha por el poder de ejercer el voto con sus labiales rojos. Años mas tarde el labial rojo fue el color del poder y la seducción. Actrices como Lana Turner o Elizabeth Taylor lucían sus labios maquillados del color del fuego.
En España también tuvimos nuestra versión, Milady de Puig, el primer labial fabricado en tierra patria, posiblemente muchas de nosotras ni lo conozcamos, pero seguro que nuestras abuelas o madres nos darán detalles de como era este labial y el furor que causó, debido a que también el rojo es el color de la inmoralidad, y cierto es que en esa época don Antonio Puig se la jugó.
Pero además de todos los adjetivos antes citados, si es cierto que debemos reconocer que este tono es sin ninguna duda el color de la alegría, quizás por la luz, o por su pigmentación, este tono suele sentarnos bien a la cara, su poder es tal que es capaz de eliminar nuestras ojeras y cansancio. Una prenda roja puede llegar a cambiarnos el estado de ánimo, hacernos mas esbeltas, o aportar mediante un determinado complemento, un toque de atención, un no pasar desapercibidos.
En China el rojo es el color de la felicidad, las chinas se casan de rojo, los niños visten de rojo y la fiesta de año nuevo que para ellos es sagrada el rojo abunda. Esto último lo hemos acogido en occidente y como no llevado al consumismo y es que parece que es mas grave que en fin de año no lleves ropa interior roja a que termines las uvas sin atragantarte.
Si, es mi color preferido, y no es que quiera convenceros escribiendo un artículo sobre sus múltiples propiedades, es solo que me apetecía compartir mi reflexión de los martes, y que mejor que hablar de uno de los colores que son tendencia este otoño. Y si, sé lo que estáis pensando "uy no habla sobre la suela de Louboutan ni sus diferentes conflictos con Amancio y Vittorio y Luchino", y no es que no merezcan mención, pero me parecía mas interesante recordar los vestidos rojos en el cine que marcaron un antes y un después en nuestras retinas. Recordaros cada diva con la que nos hemos sentido identificadas en un momento u otro. Y es que cine y moda siempre irán de la mano, y los colores siempre, siempre, en el cine no son casualidad. Por en el cine nunca nada es casualidad ni sucede porque si.
Y quien no se haya emocionado con Nastassja Kinski en Paris Texas, no sabe de lo que estoy hablando.
Hasta el próximo martes ;) .
Salud Martínez
@Tumodanomeincom
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